La arquitectura sostenible se cimenta en la búsqueda del equilibrio entre los factores medio ambientales, económicos y sociales. Una construcción no sería sostenible si la inversión económica para conseguir un edificio respetuoso con el medio ambiente, no fuera amortizable en un tiempo determinado. En la actualidad, existen multitud de soluciones para conseguir construcciones o reformas eficientes a precios competitivos.